miércoles, 8 de mayo de 2013

Búsqueda

Unas escalinatas de madera vetusta en espiral, el sillón rojizo emblema del parque municipal, un paradero que conduce a la zona norte, un arbusto de toronjil con frutos caídos a sus raíces, el portón de la librería judía, la pendiente de un puente con barandales de hierro. Manuel Ovalle sigue estos lugares con sus fotografías, captura cada espacio con la certeza de que la mujer de su vida estuvo presente en ese lugar. Obsesionado, recorre cada detalle de la ciudad en búsqueda de las postales que lo conduzcan a su encuentro. Ella, sin embargo, siempre está un paso más adelante.

4 comentarios:

Angela María dijo...

Al inicio pense que era parecido al cuento de Cortázar.
Sin embargo, parece ser la historia del fotógrafo Murad Osmann.

Un beso.

Anónimo dijo...

Una historia de amor en la retina de una cámara.

Enhorabuena por el blog, me gusta.

Saludos.

Esteban Dublín dijo...

Quisiera conocer esa historia, Angelita.

Gracias por las palabras, Jorge. Te espero de vuelta.

Angela María dijo...

E,

Es la historia de un fotógrafo ruso que se fue da rla vuelta al mundo con su novia, y a medida que el viaje va avanzando el toma fotografias de ella de espalda(normalmente) tomado la mano de él. Las publica por Instagram, de seguro lo has oido, la iniciativa se llama #Follow me.

http://instagram.com/muradosmann

http://designcollector.net/follow-me-to-by-murad-osmann/