lunes, 18 de mayo de 2009

Giraluna

Por fin, después de múltiples señalamientos de sus compañeros y de noches enteras de frío y de revolución esperando que le mostrara su otra cara, la luna lo miró. Desde esa noche, dejó de llamarse girasol.

(Basado en la canción homónima de Luis Eduardo Aute y, específicamente, en el extraordinario concierto que ofreció en Bogotá el 12 de mayo de 2009).

16 comentarios:

Nancy dijo...

¡Qué bello! No recuerdo la canción, quizá no la conozco pero la buscaré. Tengo varios discos de Aute.
Apapachos, me encantó

Johan Bush Walls dijo...

Maestro Dublín, mire que casualidad, cuando Auté hizo un concierto en Guatemala a mi se me ocurrió este cuento pajero, le dejo el link, pase a leerlo cuando tenga un tiempito.

http://cuentospajeros.blogspot.com/2007/11/la-cancin-de-aut.html

Alfaro dijo...

Pues sí, yo si recuerdo la canción, y el cuento me ha parecido una preciosidad. Enhorabuena.

Alejandro Ramírez Giraldo dijo...

No conozco la canción y quedé en el aire. Una pena.

Esteban Dublín dijo...

Nancy, escúchala, es millones de veces mejor que el cuento.

Johan, lo vi, gracias. Pero las casualidades no existen. Aute nos une por conspiración.

Víctor, no sabes la alegría que me da verte por aquí.

Alejandro, aquí te dejo la versión que cantó en Bogotá. Repito, millones de veces mejor que el cuento. http://www.youtube.com/watch?v=yMYBzGF6ONU

Anónimo dijo...

No quiero oir la canción, quedar en el airre es una de mis sensaciones favoritas cuando te leo.

Esteban Dublín dijo...

Jajajajaja. Está bien, Female. Pero te recomiendo la canción. De verdad, es preciosa.

Marcela dijo...

Leí varios de tus cuentitos, me gustaron mucho.
Debería existir una flor llamada giraluna, además del girasol.
Voy a escuchar la canción en la que te inspiraste.
Besos.

Tatica dijo...

Ay, Dublín, no seas soso. Deja ya de escribir para ganar suspiros aplaudidos de quinceañeras y cuarentonas, y ponte serio muchacho, que la literatura es más que pétalos soplados sobre las chancletas de Aute, y las chicas de carne ardiente pasan de giralunas...

Esteban Dublín dijo...

Marcela, escúchala, te aseguro que el cuento ni se acerca a lo que es la canción.

Tatica, no me pidas que no sea soso. Qué pereza estar pretendiendo estar escribiendo siempre en búsqueda de aprobación. A mí me gusta darme gustitos y libertades con cosas intrascendentes y elementales. Bienvenida siempre por aquí. Tú y tus críticas.

yacasinosoynadie dijo...

debe ser aterrador... como buscar con ingenuidad una utopía y encontrarla de golpe.

(pues bueno, a mi me lo parece)

Esteban Dublín dijo...

Jorge, aterrador no. Debe ser tremendamente frustrante.

Anónimo dijo...

Esteban: yo no soy quinceañera...ni cuarentona...Aute no tiene por qué estar cantándole a una mujercita... ni a una de carne ardiente ni a una de bello corazón... el cuentito tiene vida propia, aún inspirado en la canción... la canción es preciosa, sí... el cuento es literatura... la literatura es un universo gigantesco con espacio para todo y para todos... yo me saco el sombrero (la creatividad y originalidad en frasquito tan chiquito, no le cabe a cualquiera)
¡Saludos!

Esteban Dublín dijo...

Gracias, Lauri. Pero insisto en que el cuento, más que pretender contar una historia, quiere hacer un homenaje.

Naida dijo...

Qué ternura. No he escuchado la canción pero si te hizo escribir esto debe ser maravillosa.

Esteban Dublín dijo...

Naida, eres muy amable. Te recomiendo la canción.