miércoles, 18 de mayo de 2016

Ausencia de un otoño

El crujido de la hoja seca, ese extraordinario sonido que se forja de tu invitación al juego y nuestras pisadas. Porque aunque aquí no tengamos otoño, tú has encontrado la manera de hallar pámpanos en cadena para saltar sobre ellos y competir conmigo para mentirnos sobre quién pisa más. Esa trivialidad, esa ingenua manera de intentar detener el tiempo para estar contigo, esa tontería que le da sentido a mi título de papá.

1 comentario:

José A. García dijo...

EL otoño se presta para los juegos más entretenidos de todos.

Suerte,

J.