viernes, 21 de noviembre de 2008

Cuentos con nombre propio

Aquí, a las promesas no se las lleva el viento. A partir de hoy, y cada viernes mientras haya alguien que quiera su historia, habrá un microcuento con nombre propio. El de hoy, y lo cito por ser el primero en alistarse, corresponde a Túrin y aquí pueden ver su blog. Él me dio su nombre, aquí está su cuento:

El entierro
El asfalto es un imán para el alcohol. Por lo menos eso es lo que piensa el borracho cuando, luego de beberse su quincuagésimo vaso de ron, su cuerpo se abalanza incontroladamente hacia el suelo. Una lluvia de rocío se forma con el cristal instantes después de que cae el vaso y los fantasmas, que se niegan a perderse el carnaval, se beben el poco licor que le quedaba antes de que moje el pavimento. El deceso es inmediato y la congoja también. Pero mientras las mujeres se agolpan en las calles a llorar su muerte, hay un hombre que sabe que basta un gran triunfo del Junior para que Joselito se vuelva a levantar.

17 comentarios:

Recomenzar dijo...

Tremendamente fuerte y bueno tu texto Volveré por más
besos

Jaime Diaz dijo...

Excelente, muchas gracias señor!!!

Esteban Dublín dijo...

Señorita que se está despertando, muchas gracias. Te espero de vuelta por aquí.

Don Túrin, a usted muchas gracias por cambiarme su nombre.

yacasinosoynadie dijo...

jejejejejej esta bueno... mire lo que es la vida amigo Esteban, mi ultimo post fue sobre el guayabo... puedo asegurarle que el despertar de Joselito no estará exento de los males de la veisalgia…

yacasinosoynadie dijo...

Apropósito: eso de cambiar el nombre por un cuento suena como a pacto con el diablo… Amanecerá y veremos.

Mauricio Duque Arrubla dijo...

Un par de días mediod esconectado y salen estas maravillas... Caramba que uno no puede soltar este bicho ni un segundo :-)

¿Podemos saber qué conecta a cada cuento con cada personaje que "vendió su nombre al diablo"?

Esteban Dublín dijo...

Huuuuuuuuuy, no, muchachos, qué feo que digan eso. Me considero un hombre mucho más noble que el diablo. Él cambia el alma por placeres pasajeros. Yo, en cambio, les cambio el nombre por una historia que ustedes mismos solicitaron voluntariamente, un cuento que les pertenece y nadie les puede quitar, perdura en el tiempo, y es un intercambio sin tretas, sin condiciones, sin malintención, sin contratos.

Además, sobre todo y más que nada, yo soy un hombre creyente en Dios. Amén.

yacasinosoynadie dijo...

¡aleluya hermano!

Anónimo dijo...

tengo unas propuestas para vos, la primera es que no nos conozcamos físicamente nunca, la segunda es que si escribes un cuentito dónde me cuentes quién eres y me enamoro mis próximos post serán para vos,y si te gustan me los cambias por un cuentito, de esos que estás prometiendo.

Me cuentas, un beso.

Esteban Dublín dijo...

Mmmmm, trato hecho, Female.

Paulafat dijo...

Me parece supremamente bonito este blog... y muy original.
Entré porque me llamó la atención tu apellido, pero ya sé que tengo que volver.

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Tus palabras son encantadoras y generales. Me gusta mucho cómo escribes, no soy fácil de complacer. Cuál es tu vida, cuál es tu trauma? todos tenemos un dolor que nos hizo ser, cuál es tu dolor?
Dame algo para escribir, quiero tu vida de verdad, eso que no puedes contar, ese secreto que te mueve adentro...

un beso de una admiradora exigente.

Anónimo dijo...

¿Ganó el Junior o nadie pasó a buscar a Joselito por el piso aun?

Buen shot.

Esteban Dublín dijo...

Pala Labra, espero que si vuelves, no sea por el apellido.

Señorita Female, ¿eres así de exigente con tus novios? ¡Qué peligro!

Diego, Joselito ya se está levantando, porque ganó el Junior y, además, ganó el Real Cartagena. Barranquilla hoy es un carnaval.

Anónimo dijo...

Pasa que no soy tan buena escribiendo y necesito ver más, además sos muy bueno delatándote con los secretos, creo que la sra Dublín está enamorada de esa forma también.

Esteban Dublín dijo...

Jajajajaja. Pues eso creo, Female.