lunes, 18 de febrero de 2013

Paradojas de circo

Terminada la función, acurrucado detrás de los biombos, el payaso llora.

2 comentarios:

El Eskimal dijo...

Me gustó Esteban. Uno pensará que el payaso siempre está feliz, pero es también una persona y quizá también deba pagar deudas o le llegue el desamor.

Esteban Dublín dijo...

De eso se trata, mi estimado Eskimal. Gracias por seguir pasando.