Esteban, he intentado por varios sistemas entrar a tu blog, y bueno despues de mucho lo logre! pero tal vez sea bueno que mires si es que existe algun problema.. o es una conspiracion de la tecnologia para no leerte.
Lector, antes que nada. Publicista. En 2008, realicé el Taller de Microliteratura en La Escuela de Escritores de Madrid. Mis microrrelatos han sido elegidos para componer antologías latinoamericanas, publicados en diferentes revistas impresas y digitales, y premiados en Chile, Argentina y España. En 2010, la editorial Adéer Lyinad publicó mi libro Preludios, Interludios y Minificcciones. Representé a Colombia en el VI Congreso Internacional en Bogotá. Algunos de mis textos han sido traducidos al italiano y al portugués. Daniel Ávila es mi verdadero nombre.
16 comentarios:
Genial.
Jejeje, muy tranquilizador.
¡Bien! Finalmente alguien que lo confirma.
Saludos!
Me dio por leerlo a la luz de la noticia de la comunicación con los mineros de Chile. Y me dio un escalofrío.
Saludos,
PABLO GONZ
Que ... entretenido.
jajaja, esta genial.
Eso es cierto, aunque muchas veces no lo queramos entender.
Sabes, me encanta que el título tenga más sílabas que el cuento en sí!!
Lo intuía
Qué bueno!
Besos
Cartaphilus, bienvenidísima por estos lares.
Maite, ¿cierto?
Claudia, aunque no queramos escucharlo...
Pablo, me solidarizo con los mineros de Chile. Espero que su rescate no tarde tanto. Un abrazo fraternal.
Germán, me alegra.
Ángela, le damos demasiada trascendencia a la muerte. Por eso, precisamente, es que hay que disfrutar la vida.
Quimera, que no se me vuelva costumbre.
Alís, creo que todos, aunque no queramos escucharlo.
Esteban, he intentado por varios sistemas entrar a tu blog, y bueno despues de mucho lo logre! pero tal vez sea bueno que mires si es que existe algun problema.. o es una conspiracion de la tecnologia para no leerte.
jajaja, saludos.
Posiblemente tuviste algún percance con la conexión, Angelita. Si el problema persiste, avísame.
Sólo una palabra: genial.
Gracias, Belén. Vuelve cuando quieras.
Un cuento para aquellos que hemos perdido a alguien, me gusta mucho.
memo, hay que leer entre las líneas que nos trae la muerte. Vuelva.
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